Germán Álvarez-Beigbeder Pérez, hijo primogénito del insigne
músico jerezano, ha fallecido en Sevilla el pasado 01/04/2009, a los 81 años de
edad. Amante y defensor a ultranza de la música de su padre, Germán Álvarez
Beigbeder, siempre refirió a su familia más cercana que la única equivocación
que había cometido su progenitor en la vida fue la de no haberlo convertido en
músico. Por dicho motivo, encontró en la poesía el subrepticio refugio de sus
dotes artísticas, perteneciendo a diversos círculos literarios en Madrid y en
Sevilla, destacando su paso por la tertulia literaria sevillana “Noches del
Baratillo”. En el año 2007 la editorial Signatura Ediciones de Andalucía
publicó su libro de poesías; “Brega al cesarismo en la perspectiva literaria”. Desde joven elaboró bastantes artículos periodísticos, que se publicaron en periódicos de Sevilla, Madrid, Cádiz y sobre todo Jerez de la Frontera, en el que también redactó, en los años en los que vivió en dicha ciudad, las crónicas futbolísticas de su Xerez C.D.. Lamentablemente, falleció dos meses antes del ascenso a primera de su único equipo de fútbol por el que tenía afición.

Germán Álvarez-Beigbeder Pérez (1927-2009)
De su periplo por esta vida, presumía de su familia,
especialmente de su padre, por el que sentía una admiración, más que suprema,
fuera de lo común, de su hermano Manuel y de sus seis hijos. Profesionalmente, como
perito mercantil, se dedicó al asesoramiento económico y contable de grandes y
medianas empresas. De joven, presumía de haber sido uno de los hermanos
fundadores de la Hermandad de la Lanzada de Jerez de la Frontera. Residiendo en
Madrid, a finales de los años sesenta del siglo XX, formó parte del PSOE en su
etapa subversiva, ejerciendo su actividad política con los entonces denominados
“curas rojos” de los barrios obreros de la ciudad. En los años setenta se
afilió al PSOE de Sevilla en su época clandestina, destacando como un gran
militante, con una participación muy activa en su lucha por la vuelta de la
democracia al estado español. Nunca quiso ocupar ningún puesto político, pese a
la gran influencia política que ejerció en la capital hispalense en la época de
la transición junto a líderes de primer nivel que alcanzaron máximas cotas de
poder a nivel nacional tras las primeras elecciones democráticas.
Germán Álvarez-Beigbeder Pérez en la casa de la familia en Jerez.
Nació en Cádiz, aunque él se consideraba un ciudadano del
mundo, si bien, Jerez de la Frontera era su ciudad refugio. Gran musicólogo,
especialmente de Wagner y por supuesto de su padre, echó en falta a la muerte
del mismo, las partituras de muchas de sus obras. Nunca sabremos si las mismas
llegaron o no a existir, y si así fuera, cual sería el paradero de las mismas.
Es una cuestión que después de los años no se dilucidado todavía y que aún es
materia de estudio de algunos investigadores de la música de Beigbeder.
Le rendimos homenaje con una de sus poesías, denominada “Aquella
Infancia”:
Recuerdo aquel limonar
y el pregonar de molletes;
de las dos criadas sus vestes;
de campana el sonar
y de aquel olor campestre.
Del baby de colegial;
de macetas de aflorar;
del piano las cromáticas
escalas de un ser ideal.
Fue un fin la cúspide humana
de unas falsas prácticas
que a mí avivó la infancia
y desde crío pensé en traza.
Es acerbo de este orbe
con caridad a los pobres
y no justicia implantar.
Sencillo es rezar y orar
y que la campana doble.
Más información:
- Fundación Pablo Iglesias.